top of page
flower-of-life-1601160_960_720.png

CONJUNCIÓN JÚPITER-SATURNO EN ACUARIO

Foto del escritor: Flor CristaldoFlor Cristaldo

La Gran Mutación de la humanidad


El 17 de diciembre, Saturno ingresó al signo de Acuario, y ayer Júpiter siguió sus pasos. Ahora mismo, ambos forman una conjunción que abre un importante ciclo de 20 años, que a su vez es parte de “ciclos fractales” más amplios: uno de aproximadamente 200 años, que involucra unas cuantas conjunciones entre Júpiter y Saturno en signos del mismo Elemento, y uno de entre 800 y 940 años, que se cumple cada vez que la conjunción Júpiter-Saturno se produce en el primer signo del Zodiaco, es decir, en Aries.


En astrología moderna solemos diferenciar los planetas en “personales” (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno) y “transpersonales” (Urano, Neptuno y Plutón). A su vez, dentro de los personales distinguimos dos planetas particularmente lentos que llamamos “sociales”, que son el “puente” y la “barrera” entre lo personal y lo transpersonal. Claramente, nos referimos a Júpiter y a Saturno, los llamados “cronocatrores”, es decir, planetas que marcan el tiempo.


Para pensar los tránsitos mundanos, que influyen de sobremanera en el plano social y colectivo, solemos tomar a Júpiter (1 año en cada signo, aproximadamente), a Saturno (2 o 3 años, aprox.), a Urano (10 años, aprox.), a Neptuno (15 años, aprox.) y a Plutón (de 15 a 20 años, aprox.).


La astrología que estudiamos es geocéntrica, y por ende tomamos como centro nuestro punto de vista desde la Tierra. Así, vemos cómo los planetas se mueven alrededor nuestro, de forma directa o retrógrada, a través de los signos del Zodiaco, y a estos movimientos aparentes en tiempo real les llamamos "tránsitos planetarios". Los planetas, ya sean personales, sociales o transpersonales, interactúan entre ellos a través de distintos "aspectos angulares" en la rueda de 360° que constituye el Zodiaco: conjunciones (0°), sextiles (60°), cuadraturas (90°), trígonos (120°), quincuncios (150°), oposiciones (180°), etc. Cada vez que dos planetas forman una conjunción (0°), es decir, cada vez que se encuentran en el mismo grado de un signo, se dice que se cierra un ciclo y comienza otro, que se produce una “revolución”. Así, entre otros ciclos lentos tenemos al de Júpiter-Saturno, que es el que buscamos ilustrar en este texto.


¿QUÉ RELEVANCIA TIENE ESTA CONJUNCIÓN JÚPITER-SATURNO?


Algun@s astrólog@s hemos acordado en llamar “Gran Mutación” a esta conjunción Júpiter-Saturno en Acuario, y no es para menos, dado que como humanidad estamos comenzando a experimentar una nueva forma de reestructuración global, que ya no será a través de la energía de los signos de Tierra como en los últimos 200 años, sino a través de la energía de los signos de Aire, empezando por Acuario en 2021.


El año que estamos pront@s a comenzar estará signado por las cuadraturas entre Júpiter-Saturno en Acuario y Urano en Tauro; y si bien Plutón seguirá en Capricornio hasta 2024, y Neptuno en Piscis hasta 2025, ya no estarán acompañados de otros planetas lentos, ni formarán muchos aspectos disarmónicos entre ellos.


En astrología mundana, tanto Júpiter como Saturno se relacionan con la Ley, pero en dos sentidos distintos. Júpiter representa la Ley en sentido abstracto, las ideas que constituyen lo socialmente aceptable, y el sentido general de los sucesos colectivos. Así, Júpiter tiene que ver con los movimientos filosóficos, políticos y religiosos, con la expansión de nuevas ideas y conceptos que progresivamente guían la historia de la humanidad. Por otra parte, Saturno simboliza la Ley en sentido concreto, como palabra escrita e incluso ley física que marca un límite y organiza según una determinada estructura.


La última “Gran Conjunción” de Júpiter y Saturno en Aries se produjo hacia el año 1702, en el grado 6° del signo. Dentro de este gran ciclo, las conjunciones en signos de Tierra iniciaron hacia 1842, teniendo su “adelanto” con la conjunción en Virgo del año 1802; este ciclo de Tierra es el que estamos finalizando, ciclo en que la humanidad orientó su desarrollo hacia las “leyes de la materia”: la eficacia y la eficiencia en los procesos de producción, acumulación y distribución de bienes y servicios. En este lapso de tiempo se formalizaron las técnicas de la Revolución Industrial y el capitalismo, y también los sistemas de pensamiento materialistas y racionalistas cuyo avance se correlaciona con el declive de las grandes religiones.


Estos 200 años de conjunciones en el elemento Tierra han tenido importantísimas consecuencias, y sin dudas han impreso en nuestra memoria generacional algunos esquemas de pensamiento tales como el derecho a la propiedad privada, la cultura del trabajo, las políticas de desarrollo social, la importancia del sostén y el estatus económico, la lucha de clases sociales, la conservación de la materia, el método científico, etc.


¿QUÉ TRAE DE NUEVO ESTE CICLO?


El elemento Aire, cuyos signos son Géminis, Libra y Acuario, se relaciona con la mente, el pensamiento abstracto, el lenguaje, la comunicación, los puentes vinculares, y también con todas las actividades y organizaciones orientadas por la objetividad, el racionalismo y/o el idealismo.


Acuario, signo de Aire y modalidad Fija, cuyos regentes son Saturno y Urano, es el opuesto complementario de Leo. Este signo, regido por el Sol, simboliza todo centro radiante, y en contraposición, Acuario se expresa a través de lo excéntrico, lo descentralizado, lo marginal, lo alternativo, lo que a veces puede resultar ridículo y hasta revolucionario. Urano, su regente, como función planetaria trae el rayo de lo nuevo, lo imprevisto, lo inesperado, el “eureka”, el insight, la información repentina, el salto de consciencia, la mutación, lo disruptivo.


A nivel de la astrología mundana, podemos asociar a Acuario con el cooperativismo, la fraternidad, la solidaridad, la filantropía, las redes y grupos humanos nucleados por el pensamiento, los ideales y la comunicación, y también con toda tendencia social que señale el camino hacia la equidad y la libertad. Acuario también tiene que ver con la innovación, la vanguardia, el futurismo, las nuevas tecnologías, la electricidad y la electrónica, la internet y sus usos para la comunicación. A su vez, tradicionalmente se le asocia con la aviación, los fenómenos de la atmosfera, la noosfera y todo lo que se mueve en el Aire.


Saturno restringe y limita la pauta energética del signo que transita, pero en ese movimiento también la ordena, la hace madurar, la estabiliza, y nos devuelve al contacto con su realidad más esencial. Frente a esa inhibición de la energía, Júpiter expande ideales y movimientos vanguardistas que buscan una alternativa a lo de antes, que poco a poco pasa a estar en desuso. Si tenemos en cuenta que la humanidad está relativamente próxima a vivir la Era de Acuario, quizá esta Gran Mutación esté comenzando a formalizar sus bases.


El cambio de paradigma de la Tierra al Aire puede traer nuevas tecnologías de comunicación, nuevas teorías para explicar la realidad social, nuevas formas de pensar la libertad y cómo nos organizamos socialmente: ¿prevalece el individualismo por sobre el colectivismo, o al revés? ¿Podemos alcanzar cierto balance entre ambas tendencias? Quizá los nuevos tiempos nos exijan vivir en comunidad, pensarnos en red e interdependencia.


¿Qué pasa con la robótica, la inteligencia artificial, las computadoras cuánticas, las nanotecnologías, las criptomonedas, el 5G, la Big Data y otras novedades que comienzan a resonar cada vez más y más? Quizá la “nueva realidad” implique conocer estas tecnologías, sobre todo teniendo en cuenta que Urano se encuentra en Tauro desde 2017, y que próximamente formará varias cuadraturas con Júpiter-Saturno en Acuario.


¿Cómo, en medio de esta Gran Mutación, podemos habitar los territorios sin descuidar el medio ambiente y la biodiversidad? Quizá sean tiempos de resarcimiento colectivo respecto del daño que el capitalismo feroz y el modelo extractivista han hecho a la Madre Naturaleza, y quizá comencemos a cuestionarnos… ¿Podemos pensarnos separados de esta Gran Madre, de este organismo multicelular que es nuestro cuerpo? ¿Qué relación hay entre “hardware” y “software”, entre cuerpo y psiquismo?


-IMAGEN-

Diagrama de las conjunciones Júpiter-Saturno de Johannes Kepler, publicado en “Prodromus dissertationum cosmographicarum” (1596)


OKEA - Centro de Estudios de Lenguajes Simbólicos

Texto realizado por Diego Ivan Arias Angalupe y Florencia Cristaldo

Comments


Responde a toda llamada que excite tu espíritu.

Rumi

Yoga Cristal

             Astrología y Tarot

Página web y contenido creado por Florencia E. Cristaldo
bottom of page